jueves, 31 de enero de 2008

El barón Oreilled du Noir

En la noche fin de año, en la fiesta hizo furor
el barón oreilled du noir, de misteriosa condición.

El barón especulaba con la posibilidad
de comenzar el nuevo año perdiendo la virginidad.

Viendo las mademoiselles que había pronto hizo la elección
y escogió la que creía más acorde con su honor.

El acoso fue tremendo pero acaso no se enteró
de que no le hacía caso. Ni oportunidad le dio.

Hasta que vio un pelotón escoltar a mademoiselle
cada vez que pretendía ir a hacer su menester.

Y pensó monsieur du noir: Me la acaban de quitar.
¡Vaya osadía! Si esa chica era mía.

Pero monsieur du noir no llegó a desesperar
y presto fue a buscar otra chica con quien ligar.

Y allí lo encontré de custodio del servicio
esperando un orificio donde poderla meter.

Y allí lo encontré ejerciendo su oficio
de custodio del servicio: ¡Vaya vicio por joder!

Pero tampoco esta vez su objetivo él logró.
pues con gran rapidez ella con un listillo se piró.

Oh la la, oh mon dieu, ce n´est pas ello posible,
esto es algo increíble, c´est un acte du cochon.

Pero el tiempo transcurría y monsieur “na” se comía.

Así que el barón pensó: aquí bajo yo el listón.
Lo importante ahora es joder y no importa ya con quién.

Y allí lo encontré de custodio del servicio,
esperando un orificio donde poderla meter.

Y allí lo encontré ejerciendo su oficio,
de custodio del servicio. ¡Vaya vicio por joder!

Y a la gente preguntaba si podían juntos pasar
a satisfacer al pronto tan imperiosa necesidad.

Ya no miraba el barón sexo, edad o condición.
Lo único que él buscaba era quién le desvirgara.

Hasta que hubo ya quien harto de soportar tanto tostón
le dijo que era un payaso y así le vaticinó:

“Que jamás hallarás ni aquí ni en otra parte
ningún cuerpo´pa’ aparearte, sea de hombre o de mujer”.

“Que jamás hallarás agujero en que meter,
ya sea éste de madame o ya sea de monsieur.”

“Que jamás hallarás agujero en que meter,
ya sea éste de madame, o ya sea de monsieur.”

No hay comentarios: